Las mujeres, y las españolas en particular, cada vez deciden ser madres a mayor edad. En 1990 las mujeres tenían a su primer bebé a los 26 o 27 años; en el año 2013 a los treinta y ahora… ¡puf! España es uno de los países de Europa en donde más mujeres dan a luz por primera vez superados los 40; el 5,1 % de las madres primerizas tienen más de 40.
¿Recuerdas a qué edad tuvo tu madre su primer hijo?¿ y tú? 🙄
¿Cuáles son los motivos que inducen a retrasar en nuestro país la maternidad?
Son varias las causas:
- Motivos económicos, los bajos salarios dificultan la emancipación de las personas jóvenes y retrasa el proyecto de vida familiar.
- La prolongación del periodo educativo con los estudios de postgrado. Son muchos los jóvenes que no finalizan la etapa educativa hasta los 25 años o más.
- La existencia de una norma social no escrita en que establece que no se pueden tener hijos hasta que la situación económica de la pareja no esté estabilizada. Si nuestras madres y padres se «lanzaban a la aventura», ahora para tener un hijo resulta imprescindible: contrato fijo, casa con hipoteca, coche pagado, etc. ¡Así es casi imposible!
- El deseo de las mujeres de consolidar sus carreras profesionales o alcanzar una determinado status antes de ser madre. Se han esforzado mucho con sus estudios y la harán luego para consolidar sus carreras profesionales. Luego se preguntan ¿qué me arriesgo a perder si soy madre?¿qué estoy dispuesta a sacrificar?
- La falta de medidas de conciliación de la vida personal, laboral y familiar en las empresas y la nula o escasa corresponsabilidad en el hogar; el cuidado de la prole, en muchos casos, continúa recayendo sobre las mujeres.
Consecuencias en el retraso de la maternidad
Pero llega un momento en que «o sí o sí». Nos plantamos en los cuarenta y ya no se puede esperar más ¿no? 🙄
Si hace unas décadas tener un hijo a partir de los 40 años era algo extraordinario, hoy en día forma parte de lo habitual. A medida que se incrementa la edad, los riesgos también aumentan porque a partir de los 35 años y a medida que la mujer se hace más mayor, su fertilidad sufre un deterioro importante, de modo que se incrementan las dificultades para concebir. Una vez superada la barrera de los 40:
- La esterilidad femenina se eleva hasta el 65%-70%.
- Las posibilidades de aborto se incrementan debido al deterioro cualitativo de la función ovárica, que provoca fallos en la implantación del embrión en el útero materno.
- Alternaciones cromosómicas, el riesgo de síndrome de Down a los 30 años es de 1:11; a los 46 años aumenta a 1:98.
- La diabetes gestacional y la hipertensión son un riesgos comunes a todas las mujeres, pero a partir de los 40 se multiplican por dos.
- Partos prematuros. El 9,8% de los partos de madres mayores de 40 años fueron de bebés prematuros.
- Partos múltiples. Si bien tan solo un 1,9% de los partos de las mujeres menores de 40 años fueron múltiples (mellizos, trillizos o más), las posibilidades se incrementan considerablemente en las mujeres de más de 40 años.
- La placenta previa le puede ocurrir a cualquier mujer embarazada, sin embargo, algunas investigaciones apuntan que ser mayor de 35 años es uno de los condicionantes.
Además, por las dificultades en la concepción muchas mujeres deben de acudir a técnicas de fertilización que tienen un elevado coste económico y para el que las madres trabajadoras no tienen permiso reconocido que les permita ausentarse del trabajo para acudir a consultar o tratamiento.
A pesar de todos los riesgos y dificultades, muchas mujeres valientes desean ser madres. A todas ellas ¡adelante y felicidades! Anne Igartiburu, Ainhoa Arteta, Rosario Flores, Ana Rosa Quintana son ejemplos de buena salud, belleza, alegría y profesionalidad. 😉
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Fuente de datos estadísticos: Eurostat e Instituto Nacional de Estadística. Imágenes de Agustina Guerrero