¿Qué no es Responsabilidad Social Empresarial?

La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) o Responsabilidad Social Corporativa (RSC) es un concepto clave en el mundo corporativo actual, pero a menudo es malinterpretado o utilizado para blanquear la imagen de las empresas. En este artículo recogemos algunos de los errores comunes que se cometen a la hora de establecer un plan RSE.

¿Qué no es Responsabilidad Social Empresarial?

• No son acciones aisladas (donaciones, mecenazgos o campañas). La RSC no se limita a realizar donaciones o actos caritativos puntuales. La RSE consiste en acciones perdurables e implica un compromiso más profundo con prácticas empresariales, sostenibles y éticas, siendo una parte integral y continua de la estrategia y operaciones de la empresa.
• RSE como una herramienta de lavado de imagen. No se trata de una estrategia para mejorar la imagen de la empresa tras un traspié o una perdida de clientes.
• No es una estrategia de marketing, para subir ventas o captar más clientes. La RSE no debe ser utilizada únicamente como una herramienta de marketing para mejorar la imagen pública de la empresa. Las acciones de RSE deben ser únicas y reflejar un compromiso real con el bienestar social y ambiental. Las empresas que usan la RSC solo para fines de marketing pueden ser percibidas como poco sinceras o falsas, lo que puede dañar su reputación. Por ejemplo, comprometerse con un proyecto social o medioambiental a cambio de ser la imagen del proyecto, posicionando la empresa o marca en esta dirección, aunque realmente sus prácticas empresariales muestren otra cosa.
• Ser trasparente solo en algunos aspectos. Una de las principales directrices de la RSE es la transparencia de acciones y datos, pero esto debe ser así en todos los ámbitos y sectores de la empresa.
• Acciones propias de la RSE solo en algún ámbito. Por ejemplo, llevar unas buenas acciones en el ámbito económico y social, dejando de lado el aspecto medioambiental. Hay que recordar que cualquier acto llevado a cabo por cualquier empresa, tiene repercusiones económicas, sociales y medioambientales.
• Planear acciones descoordinadas, tanto fuera como dentro de la empresa. La RSE de una empresa, organización o marca debe abarcar todos los departamentos, personal, directiva, clientes, etc.
• Hacerlo solo por cumplimiento legal. Cumplir con las leyes y regulaciones es una obligación básica para cualquier empresa y no debe confundirse con la RSE. La verdadera RSE va más allá del cumplimiento legal, buscando proactivamente maneras de contribuir positivamente a la sociedad y al medio ambiente. Esto incluye prácticas como la reducción de la huella de carbono, el apoyo a comunidades locales y la promoción de la diversidad y la inclusión en el lugar de trabajo.
• Pensar que nuestra empresa o pyme es demasiado pequeña para emprender este tipo de acciones. Todas las empresas pueden aplicar los principios de RSC.

En definitiva, no es RSE todas aquellas acciones puntuales, que no perduren en el tiempo, y que no tengan una visión global, económica, social y medioambiental.

¿Por qué debe mi empresa aplicar la RSE?

La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) no solo es una tendencia, sino una necesidad estratégica en el entorno empresarial moderno. Implementar prácticas de RSE permite a las empresas no solo cumplir con expectativas éticas y legales, sino también generar beneficios tangibles. Así, entre los beneficios que podréis obtener están:

• Mejorar la imagen corporativa y la reputación
• Prevenir riesgos
• Captar y retener el talento
• Mejorar el clima laboral y la productividad
• Fomentar la innovación
• Mejorar la eficiencia energética
• Conseguir ventajas para atraer financiación

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