Está comprobado que una empresa o institución con diversidad de perfiles en su plantilla es más talentosa, resiliente e innovadora. Pero, ¿cómo se mide la diversidad en una empresa?
Beneficios y ventajas de la diversidad
La diversidad en una empresa se refiere a la presencia de una amplia gama de características y experiencias entre su plantilla. Esto puede incluir diferencias en términos de género, etnia, edad, orientación sexual, religión, origen nacional, habilidades y discapacidades, entre otros aspectos. Una empresa diversa, que valora y respeta la singularidad de cada individuo, está reconociendo que las diferencias aportan una variedad de perspectivas, ideas y habilidades que enriquecen el entorno laboral y contribuyen al éxito organizacional.
La diversidad en una empresa no solo se refiere a la representación numérica de diferentes grupos, sino también a la inclusión y equidad en el trato y las oportunidades para toda la plantilla, independientemente de sus características individuales. Por eso es tan importante saber de qué hablamos y cómo medir la diversidad. No solo es una cuestión ética y de Derechos Humanos, sino que también genera beneficios tangibles, como un mayor compromiso de los empleados y empleadas, una mayor innovación, una mejor toma de decisiones y una mejor reputación de la marca. Teniendo ya claro que la diversidad en las empresas tiene diversos beneficios, ahora viene la pregunta, ¿cómo medirla?
Cuánta diversidad hay en las empresas españolas
Parece que según el último estudio de la Diversidad y Fundación IE de IE University, las empresas españolas son muy diversas. El Índice de Innodiversidad revela que, en una escala del 0 al 10, la empresa recurrente ha pasado del 2,55 en 2019, al 3,02 en 2021 y hasta el 4,11 en 2022. Es decir, casi el doble en los últimos tres años. Aunque sea una práctica, la de medir la diversidad, aún nueva en muchos países, podemos decir que los sectores más comprometidos son el de las telecomunicaciones y, el menos, el de los medios de comunicación y entretenimiento.
En concreto, la diversidad demográfica como el género o la discapacidad son las más presentes. También las del colectivo LGTBI o el colectivo senior. En cambio, la diversidad cognitiva es donde más hay que mejorar. En concreto, las cuatro variables: diversidad de liderazgo (46,8%), diversidad de personalidad (42,6%), diversidad de resolución de problemas (37,7%) y pensamiento crítico (31,3%).
Cómo medir la diversidad en una empresa
Medir la diversidad en una empresa puede ser un proceso complejo pero importante para comprender y mejorar el entorno laboral. Aquí tienes algunos pasos que podrías seguir:
- Definir qué aspectos de diversidad deseas medir: La diversidad puede incluir dimensiones como género, etnia, edad, orientación sexual, discapacidad, origen nacional, entre otros. Decide qué aspectos son relevantes para tu empresa.
- Recopilar datos demográficos: Recolecta información sobre tus empleados y empleadas en relación con las dimensiones de diversidad que has seleccionado. Esto podría hacerse a través de encuestas o cuestionarios, asegurando la confidencialidad de la información personal.
- Calcular índices de diversidad: Utiliza fórmulas o métricas específicas para cuantificar la diversidad en tu empresa. Algunas métricas comunes incluyen el índice de diversidad de género, el índice de diversidad étnica, el índice de diversidad generacional, entre otros.
- Analizar resultados: Examina los datos recopilados y los resultados de tus métricas de diversidad para identificar patrones, desequilibrios o áreas de mejora. ¿Hay grupos subrepresentados o sobrerrepresentados en ciertas áreas de la empresa?
- Establecer objetivos y acciones: Basándote en tus hallazgos, establece metas para mejorar la diversidad en la empresa y desarrolla un plan de acción con iniciativas concretas para lograr esos objetivos. Esto podría incluir programas de reclutamiento inclusivos, capacitación en diversidad y sensibilización, políticas de promoción equitativa, entre otros.
- Evaluar y ajustar: Regularmente, revisa tus métricas de diversidad y evalúa el progreso hacia tus objetivos. Ajusta tus estrategias según sea necesario para abordar nuevas áreas de mejora o desafíos emergentes.
Recuerda que medir la diversidad es solo el primer paso. Es crucial también promover una cultura inclusiva donde toda la plantilla se sienta valorada y respetada, independientemente de sus diferencias.
Herramientas para medir la diversidad
Aunque como en otros ámbitos de la igualdad, las mediciones no son solo cuantitativas, tenemos herramientas que nos pueden acercar a la valoración óptima en nuestra empresa o institución. Una de ellas es el test European Diversity Charter. Se trata de una herramienta dirigida a empleadores de los sectores público y privado y a organizaciones tanto grandes como pequeñas.
Se trata de un apoyo para la autoevaluación, pero debemos tener en cuenta las políticas de diversidad que ya existen en nuestra compañía, si ha habido conflictos anteriores o si hay un interés conjunto en alcanzar mayores cuotas de diversidad. Por eso, advierten, que los resultados son confidenciales, pero también orientativos. Otra cosa positiva es que la evaluación no dura más de 30 minutos y se obtienen los resultados por correo electrónico.
Laura L. Ruiz, periodista especializada en igualdad