El Mobbing Maternal. «¿No te habrás quedado embarazada?»

El Mobbing Maternal otro de los muchos frentes abiertos que tenemos las mujeres en la actualidad. Hoy os queremos hablar de esta situación y sus características. Si te sientes identificada, pide ayuda. Si has superado esta situación, cuéntanos tu historia. Puede ser de gran ayuda a muchas mujeres.

Suponemos que a todas os suena el término «mobbing» asociado al entorno laboral. Por si hay algún despistado o despistada, os recordamos que el mobbing es aquella situación en la que un trabajador o trabajadora sufre presión psicológica por uno o más miembros de su grupo de trabajo (normalmente algún cargo superior al suyo), con el agravante de la complicidad y del silencio del resto de trabajadores y trabajadoras. Silencio provocado, la mayor parte de las veces, por temor a represalias o a pasar por la misma situación. Para que se considere mobbing esta situación debe alargarse al menos hasta los seis meses de duración.

Hay que tener claro que tener un jefe complicado, trabajar en un ambiente laboral muy competitivo, con sobrecarga justificada de trabajo, etc..  no es mobbing. Se consideran mobbing las situaciones siguientes:

– Se utilizan cuestiones laborales para atacar a la victima. Se sobrecarga de trabajo o, por el contrario, se asignan tareas muy por debajo de las capacidades, la formación y al experiencia del trabajador. El atacante se apropia del trabajo o las ideas del atacado. No se reconoce su valía o se aplican procedimientos disciplinarios injustificados.

– Forzar el aislamiento social. Se intenta por todos los medios separar o marginar al trabajador o trabajadora en cuestión del resto de compañeros, se tergiversan palabras o actos…

– Se ataca la vida privada del trabajador o trabajadora. Uno de los ataques que más sufrimiento genera en el atacado es este. Se niegan permisos, vacaciones o días libres, e incluso se pueden recibir burlas de lo que sucede en la vida privada de esta persona.

– Violencia física. Afortunadamente es poco común, pero si que aparecen algunos casos. Es muy grave e intolerable. Puede aplicarse la violencia física a los objetos (pegar portazos, puñetazos contra la mesa o la pared…) o contra el trabajador.

Teniendo claro que es el mobbing, nos podemos hacer una idea de lo que hablamos cuando decimos mobbing maternal y las situaciones que la futura madre puede llegar a vivir.

Ilustración de Julián Lorenzo

El mobbing maternal es ese mismo acoso, pero a mujeres embarazadas. En la mayoría de los casos, la trabajadora en cuestión no era víctima de mobbing antes de quedarse embarazada y no existía ningún problema en su entorno laboral.

Con el mobbing maternal, el atacante o acosador tiene dos objetivos claros:

– Para el empleador un embarazo puede ser sinónimo de un gasto económico difícil de asumir. Por ello, uno de los objetivos del mobbing maternal es el abandono voluntario del trabajo por parte de la trabajadora embarazada.

– Otro de los objetivos está dirigido al resto de empleadas y es el de dar ejemplo. Hacer ver al resto de las empleadas que es lo que sucede cuando una decide quedarse embarazada.

Como puedes suponer las secuelas son nefastas, especialmente en un período delicado como es el embarazo. Aparecen la depresión, ansiedad, fobias que antes no existían, un deterioro de la autoestima y de la fortaleza emocional, síndrome de estrés postraumático… Además, otra de las consecuencias más graves es la sensación de culpa que se instala en la trabajadora y futura madre.

¿Qué hacer ante esto? Pedir ayuda y asesoramiento. Que estudien bien tu caso y te asesoren en los pasos a dar y, sobretodo, tener claro que un embarazo no es algo por lo que sentirse culpable ni pedir perdón.