Los medios de comunicación y el propio gobierno nos informan de la aprobación del Real Decreto 1105/2014, de 26 de diciembre, por el que se establece el currículo básico de la Educación Secundaria Obligatoria y del Bachillerato, que impone la enseñanza de contenidos relacionados con la igualdad de oportunidades y violencia de género en los estudios de ESO y Bachillerato.
Fomentar la igualdad de manera efectiva
El mandato, que se recoge en el artículo 6.2, señala como funciones de las Administraciones educativas el fomento de la igualdad efectiva entre hombres y mujeres, la prevención de la violencia de género, y la transmisión de los valores inherentes al principio de igualdad de trato y no discriminación. A tal fin, se ordena incluir en la programación docente la prevención de la violencia de género, evitar comportamientos y contenidos sexistas, y superar aquellos estereotipos que supongan discriminación. Pero además, la misma norma (Disposición transitoria 6ª) informa que serán los Ministerios y las Administraciones en colaboración también con otras organizaciones implicadas en la educación las que coordinaran actividades de información, campañas de sensibilización y acciones formativas a fin de fomentar la igualdad de oportunidades y la prevención de la violencia de género mediante la organización de conferencias, seminarios, talleres, etc.
Evolución española en materia de igualdad
El estudio «La evolución de la adolescencia española sobre la igualdad y la prevención de la violencia de género» (datos referentes al año 2013), promovido por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, muestra tendencias preocupantes. El porcentaje de chicas que reconocen que algunas o muchas veces ha sido insultada o ridiculizada por su pareja alcanza el 4%, el 2,8% afirma que la han pegado, el 6,3% que se ha sentido obligada a conductas de tipo sexual en las que no quería participar, y el 9,3% que ha recibido mensajes a través de internet o del teléfono móvil en los que la insultaban, amenazaban, ofendían o asustaban.
Ante esta situación, la población española ha reconocido en la educación el instrumento más eficiente para superar la violencia de género y construir una sociedad más igualitaria. Datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (Barómetro marzo 2004) señalan que más del 96% de las personas entrevistadas manifiestan su acuerdo con que “enseñar a los jóvenes el respeto mutuo” podría ser una medida útil para luchar contra la violencia de género. Con el Real Decreto ahora aprobado, no nos queda sino reconocer que «estamos de enhorabuena»; tanto profesionales especializados en los temas de igualdad de oportunidades y la prevención de la violencia de género, como madres y padres, chicas y chicos, el personal docente y el conjunto de la sociedad, en general. Así pues, ¡manos a la obra!
